Castilla y León fue la Comunidad con una menor tasa de condenados adultos en 2016, un 5,1, con un total de 10.551 condenas, con lo que mantiene la posición que ocupó en 2015, mientras que se sitúa como la segunda con una tasa más baja de delitos, 6,9, sólo por detrás de Castilla-La Mancha (6,8).

En valores, absolutos, Castilla y León fue la octava región con mayor número de delitos cometidos, 14.307, casi 3.000 más que en 2015, de los cuales 11.740 fueron perpetrados por hombres y 2.567, por mujeres, tal como consta en los datos hechos públicos este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

En el caso de los menores condenados, la Comunidad continúa en la sexta posición entre las regiones españolas, con 738 condenas y una tasa del 9,2, por detrás de Ceuta, Baleares, Canarias, Comunidad Valenciana y La Rioja, mientras la media nacional se quedó en 7,2.

En cuanto a número infracciones penales cometidas, Castilla y León es también la sexta, con 1.198, de las cuales 1.135 fueron delitos y 63, faltas. Por delante de ella se situaron Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña, Canarias y Comunidad de Madrid.