El escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, fue presentado el jueves ante el Juzgado de Primera Instancia número 3 de Granada y en él se pide la puesta en marcha de una serie de medidas en el ámbito civil y penal "sin mayor dilación" a tenor del "riesgo objetivo" en el que se encuentran los menores, solicitando su "envío urgente" al Juzgado de guardia para el inicio de acciones penales; así como que el mes de agosto sea hábil para esta causa.
El letrado del padre se refiere, entre otros, a delitos de desobediencia a la autoridad judicial; de sustracción interparental de menores, de violencia psicológica habitual contra los hijos y a un delito contra la administración de justicia, considera autores de este último tanto a Juana Rivas como a aquellos que pudieran haber participado en los hechos como "inductores", "colaboradores" o "encubridores".
Junto a ello, alude a que Juana Rivas se encuentra en un estado psicológico de "desequilibrio emocional" y por lo tanto "presenta un riesgo para su hijos, ya que sus comportamiento son imprevisibles y puede dirigirlos contra éstos".
El exmarido de Juana Rivas también la acusa de un delito de violencia psicológica continuada contra él derivada de la sustracción de los menores, a los que habría inducido "ideas falsas".
El abogado Adolfo Alonso sostiene que "la gravedad de los hechos" y la "alarma social" que la madre está generado conllevan que la orden de localización no sea "suficiente", por lo que cree que "no queda más alternativa para proteger a los menores" que Juana Rivas sea detenida.
También pide que sea requerida para que manifieste si tiene permiso de armas y proceda en su caso a su depósito, además de que, ya en el ámbito civil, se ordene a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para que sigan buscando a los niños a fin de que sean entregados al padre.
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