En un comunicado, el Consistorio palmesano ha expuesto que el tratamiento se hace en un terreno de titularidad municipal calificado de 'Sistema General de Infraestructuras' en el PGOU y que reconoce, entre usos, el vertido de material de obra.

Asimismo, el Ayuntamiento ha señalado que trata desde el año 2013 los materiales obtenidos de dichas obras para después ser reutilizados en estas obras y que se produce ninguna actividad lucrativa, "sino una racionalización del proceso de tratamiento de los materiales, que se gestionan según un ciclo de menor impacto ambiental y menor coste logístico".

En este sentido, han asegurado que un tratamiento conforme a las premisas legales que exige la normativa habría supuesto un ahorro de unos 300.000 euros.

Desde Cort han explicado que el artículo 59 de las normas urbanísticas vigentes especifica que en los suelos de Tratamiento de residuos Son Reus se permiten, entre otros, los vertederos controlados de residuos sólidos urbanos, planta de incineración de residuos sólidos urbanos, instalaciones de reciclado de residuos, vertederos de escombros de obras y el almacén de pilas y de materias y productos reciclados.

Igualmente, han indicado que los materiales depositados en este espacio "son obtenidos en las obras municipales de mantenimiento y reciben un tratamiento de picado, idéntico al que recibirían en la planta de tratamiento del Consell de Mallorca".

Una vez recuperados, los materiales se reutilizan siempre dentro de estos mismos límites y el seguimiento de su manipulación lo realizan los técnicos municipales.

"Por lo tanto, este procedimiento cumple perfectamente con la necesidad de reutilizar los materiales generados en las obras de mantenimiento realizadas dentro del término municipal en el mismo ámbito en el que se obtuvieron", han añadido.