Los hechos se produjeron a última hora de la tarde de este martes, cuando diferentes llamadas en la sala de comunicaciones del 092 informaron de una pelea con arma blanca en una calle del distrito Cerro-Amate, que se trasladó por la emisora a varios patrulleros para la correspondiente actuación.

A la llegada al portal donde fueron requeridos, los agentes localizaron a un varón de unos 30 años con varias heridas en costado y cuello producidas por arma blanca y, junto a él, a su madre, con un posible cuadro de ansiedad, así como otro varón con un corte en un dedo.

El agredido manifestó que se había producido una disputa y que el detonante de la pelea se debió a que la pareja sentimental de su madre suele vejarla e insultarla, e incluso alguna vez ha llegado a agredirla.

Igualmente, afirmó que él ya no soportaba más esta situación, por lo que lo intentó echar de la vivienda, propiedad de su madre, provocando una discusión entre los tres, hasta que el presunto agresor se dirigió a la cocina, se hizo con dos cuchillos y lo apuñaló en sendas ocasiones, la segunda con la clara intención de clavárselo en el cuello, tras lo que intentó huir del lugar.

La madre corroboró a la Policía Local todo lo denunciado por su hijo, así como la situación continuada de malos tratos que sufre por el pánico que le tiene a su pareja, lo que ha provocado diferentes agresiones.

Asimismo, afirmó que en esta ocasión llegó a temer por la vida de su hijo y manifestó su deseo de denunciar los hechos, por lo que la remitieron a agentes del Grupo Diana de la Policía Local, grupo especialista en violencia de género, para prestar declaración y acometer las medidas oportunas. Añadió además que su hija, menor de edad, también presenció lo sucedido.

ESCONDIDO BAJO UNA CAMA

El varón que también se encontraba en el lugar corroboró a los agentes lo sucedido en el rellano y declaró que la herida que presentaba en el dedo se la produjo con uno de los cuchillos el presunto agresor, cuando intentó mediar entre ambos para evitar una más que posible desgracia.

La patrulla comunicó a los demás agentes de servicio la descripción y datos de identificación del presunto agresor y los lugares que frecuenta y, a través de una llamada a la Sala del 092, fue localizado en casa de su madre, que recibió a los agentes y les dijo que su hijo estaba escondido bajo la cama, procediendo estos a su detención y traslado hasta dependencias policiales, donde quedó a disposición judicial.

Allí reconoció haber producido las heridas al hijo de su pareja, aduciendo que tenía una mano rota y estaba en inferioridad física en la disputa.

La Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores ha recordado que este grupo está a disposición de las personas que puedan sufrir este tipo de agresiones, así como la existencia del teléfono gratuito 016 de asistencia a víctimas de violencia de género, cuyas llamadas no dejan rastro en la factura telefónica.