«Para coger el autobús que me lleva a mi trabajo a Sevilla, tengo que andar cada día 600 metros con frío, calor, sorteando baches y, cuando llueve, saltando charcos». Es la queja de Isabel García, que vive en Fuente del Rey, barriada de Dos Hermanas.

Desde hace días se levanta media hora antes, a las 6.15, para llegar a Bellavista y coger el bus.

Hace un mes, Tussam recuperó la línea 72, concesionada antes a Los Amarillos, y la convirtió en la 37.

Eso supuso que una línea interurbana pasara a ser urbana. Así, los vecinos de Fuente del Rey, que antes utilizaban la línea 72, se han quedado sin autobús, ya que el 37 no puede recogerles en un barrio que pertenece al término municipal de Dos Hermanas.

La solución que ofrece Tussam es que se desplacen hasta Bellavista, ya término municipal de Sevilla, y allí cojan el nuevo 37. Eso supone un paseo de unos 600 metros cada día.

Mientras, el Ayuntamiento les invita a utilizar el autobús de Los Amarillos que pasa por el polígono La Isla (más cercano a su barrio), pero los vecinos se quejan de que sólo pasa uno cada hora y que no tiene servicio el fin de semana.

El Consistorio replica que el 37 sólo lo cogen unas 35 personas al día del barrio y, el otro, una cada 8 horas y asegura que el de los Amarillos «sólo se pondrá cada 20 minutos si vemos que hay demanda».

La situación se ha vuelto insostenible para los 1.300 vecinos del barrio que, desde el pasado lunes, corta por la tarde la carretera de Isla Menor.