Los grandes crímenes de guerra en seis años de conflicto en Siria

Varios niños heridos esperan a recibir tratamiento médico en un hospital de campaña tras un ataque aéreo perpetrados supuestamente por las fuerzas leales al gobierno sirio en la ciudad sitiada de Douma el 4 de abril de 2017.
Varios niños heridos esperan a recibir tratamiento médico en un hospital de campaña tras un ataque aéreo perpetrados supuestamente por las fuerzas leales al gobierno sirio en la ciudad sitiada de Douma el 4 de abril de 2017.
MOHAMMED BADRA / EFE
Varios niños heridos esperan a recibir tratamiento médico en un hospital de campaña tras un ataque aéreo perpetrados supuestamente por las fuerzas leales al gobierno sirio en la ciudad sitiada de Douma el 4 de abril de 2017.

Todo empezó con un grafiti, el que pintaron un grupo de niños y adolescentes contra el presidente, Bachar al Asad, cuya familia lleva en el poder desde 1971. Su arresto fue la chispa que prendió la mecha de la revuelta popular, basada en manifestaciones pacíficas contra un dictador y fraguadas al calor de las primaveras árabes. Protestaban contra la pobreza, la corrupción y las violaciones de derechos humanos, y exigían prosperidad, democracia y libertades civiles. Pero a las promesas iniciales de Al Asad pronto las sustituyó una brutal represión militar que acabó en una guerra de todos contra todos y que ya ha provocado más de 400.000 muertos y millones de refugiados.

Y a día de hoy, seis años después, el ultimo informe de la ONU, publicado el pasado mes de marzo, confirma crímenes de guerra por parte de todos los contendientes en el conflicto, especialmente por parte del Ejército de Bachar al Asad contra la población civil. Ataques con armas prohibidas, contra trabajadores humanitarios, masacres sitemáticas, ejecuciones sumarias, tortura, violaciones... y hasta bombardeos de hospitales y escuelas. Y todo ello en medio de la más absoluta impunidad y la incapacidad de la comunidad internacional de poner fin al conflicto. Estos son algunos de los ejemplos más graves de crímenes de guerra en Siria:

Masacre de Jan al-Asal

Según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos, el 22 de julio de 2013 51 soldados fueron ejecutados por los rebeldes tras la caída de Jan al-Asal,  a unos 14 km al oeste de la ciudad de Alepo, mientras que otros 100 habían muerto en combate. El OSDH publicó un vídeo en el que, según el New York Times «se mostraba lo que parecía ser un campo de ejecución con docenas de cuerpos sin vida amontonados en una pared acribillada de agujeros de bala». El OSDH hizo responsables al Frente Al-Nusra y la Brigada Ansar al-Khalifa, indicando que los combatientes habían ejecutado a la mayoría de soldados leales que se habían rendido. Otros vídeos mostraban a algunos de los hombres muertos vestidos de civil, y algunos de los cuerpos mutilados.

Ataque químico de Guta

El 21 de agosto de 2013 el régimen sirio lanzó una gran ofensiva sobre los barrios de la periferia de Damasco, sobre todo Guta, controlados por los rebeldes. Además de  aviación y artillería pesada se lanzó gas sarín, aunque el Gobierno de Asad lo negó. Murieron 1.400 personas y hubo 3.000 heridos, y EE UU, que había dicho un año antes que el uso de armas químicas sería su línea roja para una intervención militar en Siria, reculó tras la mediación de Rusia. Asad se comprometió a destruir su arsenal químico, pero los ataques se ha seguido produciendo.  En el asalto final de Alepo las fuerzas progubernamentales asesinaron al menos a 82 civiles, entre ellos niños, según  anunció entonces en Ginebra el portavoz del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Rupert Colville.

Mercado de Duma

El 16 de agosto de 2015 aviones del régimen mataron a 112 personas, la mayoría civiles, al bombardear un mercado en  Duma. Estos ataques se repitieron en los meses siguientes en este distrito opositor.

Contra hospitales y escuelas

El 15 de febrero de 2016, unos 50 civiles, según la ONU, murieron en diversos ataques a hospitales, escuelas y refugios en dos localidades del norte de Siria en manos de los rebeldes. Uno de los hospitales era gestionado por Médicos Sin Fronteras. “Estos ataques son una violación flagrante de las leyes internacionales”, dijo un portavoz del secretario general de la ONU entonces, Ban Ki-moon.

Gas cloro y bombas de racimo

Durante el asedio al gran bastión rebelde deAlepo, desde mediados del pasado julio hasta su caída a finales de diciembre, el régimen sirio usó en numerosas ocasiones, según la ONU, gas cloro y otros agentes tóxicos. También armas prohibidas como las bombas de racimo, censuradas por sus efectos indiscriminados. Y todo en ello en densas zonas de población.

Convoy humanitario

El 20 de septiembre de 2016 la Fuerza Aérea Siria bombardeó un convoy de ayuda humanitaria de la ONU, y después disparó con ametralladoras, según el informe de Naciones Unidas. El ataque fue deliberado y considerado crimen de guerra. El convoy llevaba comida, medicamentos, ropa para niños y otros bienes humanitarios para las familias en las zonas controladas por la oposición y el Gobierno lo sabía. Murieron 14 personas.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento