Los padres intentarán que sea la Consejería de Educación la que financie la terapia, pero están dispuestos a pagar a los psicólogos de su bolsillo, ellos mismos, si no reciben la ayuda pública.

Algunas APAS se han puesto de acuerdo con Arkhe, una empresa de psicología integral, para que los niños de los colegios e institutos sean visitados por psicólogos cualificados una o dos veces a la semana. La frecuencia dependerá del presupuesto y de si hay o no financiación de la Consejería de Educación.

«Hasta ahora, los centros sólo tienen orientadores y nosotros queremos psicólogos», comenta Abellán, quien asegura que «estos profesionales podrían tratar el fracaso escolar, la baja autoestima de algunos chavales y hablar con ellos para reducir la agresividad y la violencia que se vive actualmente en los centros escolares», concluye.

La psicóloga de Arkhe, María Antonia Soto, asevera que hay muchos niños que necesitan terapia psicológica y que no la reciben. Por este motivo, se va a reunir con Educación para exponerle el problema a la espera de que decida financiar el tratamiento psicológico de los chavales. El consejero, Medina Precioso, asegura que se reunirá con las asociaciones de padres y estudiará el caso.

Falta de referentes de autoridad

«La falta de un referente de autoridad claro puede ser una de las posibles explicaciones al problema de la violencia desmedida que sufren los colegios e institutos», según manifiesta la psicóloga de Arkhe, María Antonia Soto. Muchos de los niños más conflictivos no cuentan con una estructura familiar estable y esa circunstancia repercute en su comportamiento social cuando están fuera de casa.