Cuando la ficción se adelanta a la realidad

El estreno del filme se retrasó por sus similitudes con el caso Madeleine. Dos detectives buscan a una niña de cuatro años desaparecida en Boston.

A principios de este año, Ben Affleck se encontraba finalizando la producción de su debut como director. En ese momento ni se imaginaba que un suceso real iba a conmocionar al mundo: el caso Madeleine. Y su parecido con el argumento de la película se iba a convertir en un gran problema. Affleck se lanzó a adaptar la novela Adiós, pequeña, adiós, del escritor Dennis Lehane. Se trata de un thriller dramático en el que dos detectives privados intentan aclarar la desaparición de una niña de cuatro años en la ciudad de Boston, en un caso cuyas pistas dan un giro total a la tesis policial inicial.

Coincidencias fatales

Justo en el momento en el que concluía la posproducción, saltó a los periódicos el caso Madeleine y, con él, la polémica llegó al filme. Al margen de las similitudes entre el argumento y la historia real, había algunas casualidades que llevaron a la productora BuenaVista a retrasar el estreno. Por ejemplo, la actriz que interpreta a la niña desaparecida se llama Madeline O’Brien (casi igual que Madeleine). Incluso los actores que interpretan a los padres tienen semejanzas con los McCann.

Al margen de la polémica, Ben Affleck (que ya obtuvo un Oscar por el guión original de El indomable Will Hunting) se atreve por primera vez a ponerse tras las cámaras. Dirige a su hermano Casey, a  Michelle Monaghan y Ed Harris y Morgan Freeman.

* EE UU, 2007. Dir.: B. Affleck. Int.: C. Affleck, M. Monaghan, Morgan Freeman. Dur.: 114 min.

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