Aunque no hubo declaración conjunta de los ministros de Economía y Finanzas (Econfin) de la UE, reunidos en Luxemburgo, la postura quedó clara: el presidente del Eurogrupo, Jean Claude Juncker, calificó como «desorbitada» la sugerencia de algunos ministros italianos de volver a la lira. El vicepresidente económico español, Pedro Solbes, la tachó de «extravagante». El propio ministro italiano de Economía, Domenico Siniscalco, se vio obligado aclarar su postura: «La moneda de Italia es el euro».

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Cómo ha afectado a los españoles

Pros: La inflación está más controlada y los tipos de interés se han reducido. En viajes a la eurozona no hay que cambiar dinero, y nuestra moneda es ahora más fuerte frente al dólar.

Contras: El redondeo disparó los precios, nuestras diferencias con otros países en renta o salarios son ahora más evidentes y aún pensamos en pesetas para cantidades grandes.

Nuevo diseño en la cara común

La Europa de los 25 se verá reflejada en el euro, que llevará en su cara común un nuevo mapa con todos los países. El cambio, que se hará en 2007, afectará a las monedas de 1 y 2 euros, y a las de 10, 20 y 50 céntimos.

Referendos en Irlanda y Portugal

El rechazo francés y holandés a la Constitución Europea y la suspensión del referéndum por parte del Reino Unido no han desanimado ni a Irlanda ni a Portugal. El ministro irlandés de Exteriores confirmó ayer que su país celebrará la consulta prevista e insistió en que había un compromiso para que todos los países de la UE hicieran un esfuerzo a fin de ratificar el tratado antes de noviembre de 2006. Por su parte, el Parlamento luso votará la revisión de su Constitución el día 22, como paso previo para convocar el referéndum.