Antonio Capel Riera, presidente de la asociación de inmigrantes latinoamericanos (Asolatines), detenido junto a su mujer Ivette Durán, como presuntos autores de varios delitos, declaró este viernes durante más de cuatro horas ante la juez Miriam Marín, titular del juzgado de Instrucción número 2 de Murcia.

Finalmente, ambos han quedado en libertad con obligación de comparecer un día a la semana, por los presuntos delitos de estafa, fraude a las subvenciones, contra los derechos de los trabajadores, e intrusismo, este último, sólo en el caso de Ivette Durán. La juez, además, ha acordado la retirada del pasaporte y ha impuesto a ambos la prohibición de salir de España.

En el auto de libertad, la juez motiva que no se dan en este caso los fines para los que está prevista la medida de prisión preventiva, al entender que la medida no es imprescindible para asegurar la presencia de los imputados en el proceso, porque el riego de fuga no es elevado, teniendo en cuenta el arraigo personal y familiar de los detenidos en España; que es difícil que exista reiteración delictiva; y que, por el material ya intervenido, no se va ha obstruir la investigación.

Los imputados quedan a disposición del Juzgado de Instrucción número 7 de Murcia, encargado del caso, para el que ha sido decretado el secreto de sumario.

Después de dormir en Comisaría

Antonio Capel e Ivette Durán fueron trasladados en la mañana del viernes desde los calabozos de la comisaría de San Andrés, donde permanecía detenido Capel Riera, y de la Jefatura Superior, donde pernoctó Durán, al Palacio de Justicia, en vehículos distintos y con varios minutos de diferencia para evitar que se produjera algún contacto entre ellos.

Sobre las 14,00 horas, la jueza Miriam Marín inició el proceso de toma de declaración de Ivette Durán Calderón, de nacionalidad boliviana y que según su declaró su abogado, Saúl Pereiro, del turno de oficio, se encontraba "tranquila, fuerte y animada".

Según afirmó el abogado, Ivette Durán esta "completamente convencida de su inocencia".

Capel y su mujer, Ivette Durán, máximos responsables de la Asociación de Inmigrantes Latinoamericanos en España (Asolatines) fueron detenidos el pasado martes, día 23, como presuntos autores de varios delitos, entre ellos matrimonios ilegales, fraude con subvenciones públicas, falsificacion documental y estafas.

Agentes de la Brigada de Extranjería investigan cuántos matrimonios ilegales pudieron concertar y cobrar los máximos responsables de la organización Asolatines, el matrimonio Antonio Capel e Ivette Durán, detenidos ayer a raíz de una denuncia presentada hace unos siete meses por una víctima.

Ya se han realizado los registros

Fuentes de la Jefatura de Policía de Murcia informaron de que los agentes realizaron ayer tanto las detenciones como los registros en la sede de la asociación, en la calle Lepanto, y en la vivienda de la pareja, en la avenida Juan Carlos I, donde han localizado abundante documentación sobre las actividades de Durán y Capel.

Desde el momento en que se conoció la primera denuncia contra la pareja por la concertación de un matrimonio "blanco", la policía fue ampliando las investigaciones, que han llevado a los arrestos de otras diez personas, cinco empleados y cinco personas sin permiso de residencia en España y que podrían ser "presuntas víctimas" de la pareja.

La policía continúa hoy con la toma de declaraciones, el análisis de la abundante documentación y con la elaboración del atestado que aportará al juez junto con los detenidos.