La manifestación la ha convocado a nivel autonómico la Plataforma per l'Ensenyament en las tres capitales de provincia bajo el lema 'Ni LOMQUE ni retallades. Més inversió, més calitat, més valencià i més dignitat', aunque la planteó también contra las 'reválidas' antes de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, anunciara la suspensión de sus efectos académicos tras iniciar la legislatura.

En Valencia, cerca de un millar de personas -según la organización- han recorrido las calles del centro de la ciudad entre sonidos de tambores, 'dolçaines' y gritos de "Menos corrupción y más educación", bajo una marea de paraguas amarillos.

La comitiva ha estado enmarcada con pancartas con proclamas como 'Sí al ensenyament, sí al valencià', 'Educación para todos: ni LOMCE ni 3+2', 'El estudiantado en pie de guerra', 'Recuperem el futur: en tu lluita diaria practica la posibilitat de guanyar' o 'Aturem la LOMQUE', esta última con una caricatura del exministro de Educación que sacó adelante la norma, José Ignacio Wert, con el lema #wertgonya.

Los tres sindicatos integrados en la plataforma -CCOO PV, UGT-PV y STEPV- han avanzado la intención de la comunidad educativa de convocar una huelga estudiantil en febrero o marzo de 2017 para insistir en la retirada de la LOMCE, tras la "multitudinaria respuesta" de la última jornada de paros que se produjo justo un día antes de que Rajoy anunciara la paralización de las pruebas.

"LAS PRUEBAS SIGUEN EN LA LEY"

Al respecto, el portavoz de la organización y presidente de FAPA València y la Confederación Gonzalo Anaya, Màrius Fullana, ha subrayado que, de momento, esta ley educativa "continúa vigente" y "las pruebas siguen incluidas en ella", por lo que ha denunciado que los alumnos de último curso de Bachillerato "no saben qué será de ellos" este curso de cara a afrontar las pruebas de acceso a la universidad. "Es una ley injusta, mercantilista y que va contra los intereses de los estudiantes. Ya está bien", ha reivindicado.

Frente a este modelo, ha pedido una norma educativa que "eduque en valores" a los jóvenes para "enfrentarse a una sociedad injusta" y "sean capaces de cambiarla". En definitiva, ha manifestado la importancia de "seguir luchando para hacer fuerza frente a un Gobierno que no se sabe cómo funciona" y de "mirar otros ejemplos educativos en países de Europa donde hay más estabilidad".

Se trata, por tanto, de una reivindicación "necesaria para revertir los recortes, recuperar las inversiones y tumbar la LOMCE", como ha agregado el secretario de Enseñanza Pública de UGT-PV, Javier González, que cree que la situación "ha avanzado bastante" tras la suspensión de las 'reválidas', el "tema más espinoso". Con todo, ha advertido que la mayoría no absoluta del Ejecutivo en el Parlamento "le obliga a ceder para sacar adelante la LOMCE" y ha confiado en que "no bloquee las reformas en el Senado", donde sí tiene capacidad.

Por parte de CCOO PV, la secretaria general de la Federación de Enseñanza, Xelo Valls, ha insistido en que la ley "sigue en vigor" y que la comunidad educativa sigue "empeñada" en su retirada. Al respecto, ha apuntado "el planteamiento del PSOE, Ciudadanos y el PP" de estudiar una nueva ley. "Cuando se ponga en marcha nos lo creeremos", ha remachado, para pedir que en la negociación estén presentes los docentes porque "no son unos extraños".

"UN PASO MUY PEQUEÑO"

La secretaria nacional del STEPV, Beatriu Cardona, ha coincidido en que la retirada de las 'reválidas' "es un paso muy pequeño" y ha recordado otros aspectos de la LOMCE como la religión "evaluable", la clasificación "por itinerarios" y el modelo "de competencias siguiendo el modelo PISA para crear estudiantes dóciles". En definitiva, ha definido la ley como una norma que "segrega, adoctrina y promueve la privatización".

De Escola Valenciana, el presidente Vicent Moreno ha criticado que el Gobierno "torea" a la comunidad educativa porque "una solución no es congelar las 'reválidas', es algo que no tiene credibilidad".

Finalmente, a nivel político, la coordinadora local de Esquerra Unida del País Valencià, Rosa Albert, ha reivindicado la importancia de que la nueva ley "haga una apuesta por la educación laica y de calidad" y ha definido la suspensión de las pruebas de la LOMCE como "una retirada momentánea que obedece a motivos estratégicos". "Cuando (el Gobierno) tenga la mayoría, la tumbarán", ha apostillado.