La operación 'Troquedos' se ha saldado con la detención de nueve personas, seis de ellas menores, como presuntas autoras de los delitos de robo con fuerza, falsedad documental y receptación, todos ellos vecinos de las pedanías murcianas de Alquerías, Torreagüera, San José de la Vega, El Raal y Puente Tocinos.

En los registros, practicados en dos viviendas de Alquerías y en un taller mecánico de Beniel, se han incautado numerosas piezas de ciclomotores y motocicletas tales como chasis, ruedas, placas de matrícula, carenados y motores, alguna de las cuales habían sido modificadas en su color y borrado el número de bastidor.

La Benemérita inició la investigación en diciembre del pasado año, al detectar un aumento de robos de ciclomotores y motocicletas en las localidades de Alquerías, Torreagüera y Beniaján, unos hechos que habían generado cierta alarma social en la zona.

El estudio de estos hechos, a priori aislados, permitió detectar ciertos nexos de unión que conducían a sospechar que los robos estaban siendo cometidos por un mismo grupo de personas, con ciertos conocimientos delictivos.

Fruto de estas indagaciones, la Guardia Civil identificó otra posible coincidencia entre los delitos investigados. Alguna de las víctimas había anunciado la venta de los vehículos en un conocido portal de Internet, con la particularidad de que en esta página, el vendedor puede, además, indicar el lugar donde se encuentra el producto a la venta, mediante su ubicación vía GPS.

Con esta información, la Guardia Civil dispuso una serie de vigilancias de los domicilios relacionados con alguno de los anuncios, donde detectaron la presencia de varios jóvenes en actitud sospechosa por lo que se mantuvieron los servicios hasta lograr la detención, in fraganti, de varios de ellos, cuando se disponían a cometer los robos.

Recientemente, y al hilo de estas detenciones, la Guardia Civil ha identificado al resto de miembros de esta organización criminal que, bajo la dirección del supuesto líder -un joven, de 18 años y vecino de la pedanía murciana de Alquerías, al que el resto del grupo apodaba 'el Jefe'- ejecutaban las distintas tareas delictivas.

Los investigadores han constatado que los ahora detenidos trabajaban bajo la mano férrea de este joven que, supuestamente, no dudaba en amedrentarlos cuando sus órdenes no eran cumplidas o cuando decidían abandonar el grupo.

Esta persona era la encargada de organizar los robos con una selección previa de sus objetivos para, más tarde, y una vez obtenido el 'botín', hacerlo llegar hasta un taller mecánico donde el gerente, en connivencia con éste, los desmontaba para obtener las piezas que eran vendidas en la provincia de Alicante, a través de otro de los detenidos.

Los investigadores han constatado que la trama delictiva llegaba más allá del propio despiece de las motos, con la adquisición de chasis de vehículos accidentados para montar sobre éstos las piezas robadas, consiguiendo así vehículos nuevos y legales que ponían a la venta,

incluso, a través de la misma plataforma de Internet empleada para la selección de los objetivos.

La Guardia Civil ha puesto en conocimiento de la autoridad judicial el resultado de la investigación, por lo que ha sido autorizado el registro de dos viviendas en Alquerías y la inspección del taller mecánico en Beniel, donde se han recuperado numerosas piezas de ciclomotores y motocicletas, alguna de las cuales habían sido modificadas en su color y borrado el número de bastidor.