En rueda de prensa en Dos Hermanas (Sevilla) para presentar el programa Ciberexpert@, Sanz ha dado su pésame por las pérdidas humanas, en concreto, dos mujeres de 104 y 85 años que se da la circunstancia que eran abuela y madre del hermano mayor del Silencio, Eduardo del Rey, "una persona conocida y querida en Sevilla".

A falta de determinar definitivamente las circunstancias que provocaron las llamas, calificando de "precipitado" afirmar nada al respecto, el delegado sí ha aludido a que "todo hace prever que pudiéramos estar ante un caso de un calentador" como origen del suceso. La Policía, en este sentido, desarrolla sus investigaciones al objeto de poder ofrecer sus conclusiones con posterioridad.

Sanz ha aprovechado para alertar del riesgo que supone que, en días de frío, se pongan artilugios de calefacción y luego los habitantes del domicilio se puedan quedar dormidos dejándolos encendidos. "Hay que ser conscientes de que hay que apagarlos y del peligro que suponen", ha advertido, apuntando también a la necesidad de que estos aparatos cuenten con las condiciones de seguridad necesarias y de renovarlos, llegado el caso y "en la medida de lo posible", si por ejemplo el cableado es deficiente o los enchufes no están en un estado adecuado. "Es verdad que tiene un coste, pero mucho más coste es la vida de una persona", ha sentenciado.

El incendio se originó sobre las 22,00 horas en una vivienda situada en la primera planta de un bloque de pisos de ocho alturas de la calle Virgen de la Antigua. Las víctimas perdieron la vida como consecuencia de la inhalación de humo, que afectó a toda la escalera de la edificación.

Hasta el lugar del incidente se trasladaron cinco vehículos de emergencias, entre los que se encontraba una ambulancia de EPES, dos bombas urbanas ligeras, una escala y vehículo de mando que actuaron sobre el edificio afectado y evacuaron a los ocupantes. Una hora después, y a pesar de su aparatosidad, el incendio fue controlado.