El sector que más ha influido en el aumento interanual de la producción industrial es el de la energía con un 13% y una repercusión de 2,802, seguido por los bienes de consumo no duradero con 4,3% de variación y una repercusión de 1,796, los bienes intermedios con tasa de 4,7% y una repercusión del 1,155, los bienes de equipo con 13,8% y 1,136 de repercusión y los bienes de consumo duradero, con una variación interanual del 12,8% y una repercusión de 0,462.

Destaca la repercusión positiva de la industria de la alimentación, que con un 6,4% de variación presenta una repercusión de 2,216, le sigue la captación, depuración y distribución de agua con una variación interanual del 23,3% y una repercusión de 1,408 y el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado; refino de petróleo con una variación interanual del 9,0% y una repercusión de1,394.

Por otro lado, registra la mayor repercusión negativa la fabricación de productos metálicos, excepto maquinaria y equipo con una variación del -13,3% y una repercusión de -0,824 seguida por la fabricación de bebidas con una tasa del -9,2% y repercusión de -0,269.

Se observa que las ramas de actividad con mayores crecimientos en su producción con respecto al mes de septiembre del año anterior son: otras industrias (37,7), otras industrias extractivas (37,2%), fabricación de otros productos minerales no metálicos (27,3%), reparación e instalación de maquinaria y equipo (23,9%) y captación, depuración y distribución de agua (23,3%).

En sentido contrario la industria de la madera y del corcho, excepto muebles; cestería y espartería (-23,6%), las artes gráficas y reproducción de soportes grabados (-18,2%) y fabricación de material y equipo eléctrico (-13,8%) son las ramas que registran las menores tasas de crecimiento interanual.