En el conjunto del país, las personas fallecidas por ahogamiento en espacios acuáticos se elevan, hasta octubre de 2016, a 385, nueve más que a 31 de octubre del pasado año.

Esta cifra, pese a ser superior a la misma fecha del año anterior en el 2,38 por ciento, no ha desbordado escandalosamente los datos a 31 de octubre porque durante este mes se han producido 25 muertes menos por ahogamiento que en 2015, al situarse los óbitos por este motivo en 24 en vez de los 49 que se dieron en octubre de ese año.

A 30 de septiembre de 2016, el número de fallecimientos en espacios acuáticos españoles era casi un 10 por ciento superior al mismo día de 2015.

Octubre, con sus 24 fallecimientos, se sitúa así en el tercer mes con menos muertes en el medio acuático, por detrás de febrero, en que hubo 20, y marzo, en que se dieron 22. Por el contrario, durante 2015 fue el tercer mes con más muertes, sólo superado por julio, con 85, y agosto, con 70.

A lo largo de que lo va de 2016, más de la mitad de los ahogamientos se han producido en playas, 212 del total, el 55 por ciento; 68, el 18 por ciento, en ríos; 28, el 7 por ciento, en piscinas; y 77, lo que supone el 20 por ciento, en otros espacios acuáticos.

Sólo en el 15 por ciento de los 385 casos, es decir, en 57, había un servicio de vigilancia y salvamento.

Por comunidades autónomas, Galicia, con 61 fallecidos, es la que más muertes lleva contabilizadas en lo que va de año, el 15,8 por ciento, seguida de Andalucía y Canarias (60 fallecidos y 15,6% en cada caso), Comunidad Valenciana (43 y 11,2%), Baleares (34 y 8,8%) y Castilla y León y Cataluña (28 y 7,3%, cada territorio).

La siguen País Vasco (15 y 3,9%), Aragón (11 y 2,9%), Región de Murcia (8 y 2,1%), Asturias y Castilla-La Mancha (7 y 1,8%, cada una), Extremadura (6 y 1,6%), Cantabria, Ceuta y Melilla (4 y 1%, en cada caso), La Rioja y Navarra (2 y 0,5%, en cada lugar) y la Comunidad de Madrid (1 y 0,3%).