El Govern de la Generalitat y 33 entidades empresariales, sociales, sindicales y municipalistas han firmado hoy en el Palau de la Generalitat la firma del Pacto Nacional para la Vivienda , que pretende ser una hoja de ruta para los próximos 10 años.

El pacto, al que no se han sumado CiU y el PP, tiene el doble objetivo de dar estabilidad al sector de la construcción y garantizar el acceso a una vivienda digna sin exclusión.

Los dos partidos de la oposición no han dado apoyo al pacto por la polémica del alquiler forzoso para aquellas viviendas que lleven vacías más de dos años cuando el propietario se niegue a reformarlo o ponerlo en el mercado de alquiler.

El portavoz de CiU, Felip Puig, ha afirmado que si el Govern retira ese punto "firmará" el pacto. Ciutadans se ha mostrado favorable al pacto y ha critiado a CiU y al PP por su falta de "espíritu constructivo".

250.000 VPO

El acuerdo prevé la movilización de suelo para construir 250.000 viviendas de protección oficial (VPO) entre 2007 y 2016 así como el inicio de obras o contrucción de otros 160.000 pisos más, sobre todo para jóvenes, y la puesta en el mercado de 62.000 viviendas del parque desocupado.

Para hacer todo esto posible se cuenta con un presupuesto de 8.221 millones de euros de los que el 81% proceden de la Generalitat y el 13% del Ministerio de Vivienda.

El pacto es un instrumento para luchar también contra las personas en riesgo de exclusión social.

Actualmente hay 145.000 hogares donde existen problemas para costearse la vivienda, unos 6.000 indigentes, 10.000 personas que viven en pisos sobreocupados y otras 20.000 que no cuentan con una vivienda digna.

Este pacto tendrá una comisión de seguimiento que velará por el cumplimiento de las propuestas y realizará sugerencias en función de las necesidades sociales y de la evolución del mercado.