Según ha informado la AECC en una nota, la investigación "es el motor" para conseguir que el cáncer sea una enfermedad prevenible, curable o cronificable. En España se diagnostican alrededor de 200.000 nuevos casos de cáncer al año y hay más de 1,5 millones de pacientes diagnosticados.

Gracias a la investigación la supervivencia en cáncer se ha incrementado un 20 por ciento durante los últimos 20 años. Por eso a través de la Fundación Científica de la AECC llevan "más de 40 años impulsando la formación y estabilización de profesionales en distintas áreas de la oncología, destinando desde el año 2.010, 34 millones de euros a proyectos de investigación.

Con respecto a la prevención, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se podría reducir el riesgo de desarrollar cáncer en un 40 por ciento con la adopción de hábitos de vida saludables por lo que uno de los pilares de la AECC es concienciar sobre la importancia de estos hábitos.

Así la comunidad científica de la AECC está cada vez más de acuerdo, y así lo demuestran diversos estudios, que concluyen que estos hábitos -dieta equilibrada, no fumar, el consumo de alcohol moderado, realizar ejercicio de manera habitual, una protección adecuada frente al sol- son igualmente importantes tanto para reducir el riesgo de desarrollar un tumor, como para mejorar la calidad de vida de las personas a quienes ya se les ha diagnosticado un cáncer.

La información, por sí sola, no conduce a una modificación de los hábitos, por tanto, son necesarias intervenciones más complejas para lograr, no sólo cambios en determinadas conductas, sino modificaciones más profundas en las actitudes, que se traducirían en la adquisición de un nuevo estilo de vida.