En una nota remitida por la Subdelegación del Gobierno, Iglesias ha pedido a los municipios onubenses que presenten proyectos "que garanticen el cumplimiento de los requisitos que exige la Unión Europea para el Programa Operativo Feder de Crecimiento Sostenible 2014-2020".

En este sentido, el subdelegado ha destacado la rapidez del Gobierno de España en la publicación de esta segunda convocatoria y la disposición del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas "a ayudar a todos los ayuntamientos interesados que se quedaron fuera de la anterior convocatoria a despejar sus dudas o solucionar las dificultades que se les pueda presentar a lo largo del proceso que se inició el pasado 7 de octubre".

Asimismo, Iglesias ha subrayado que Andalucía recibe en esta nueva convocatoria más de 103 millones de euros, lo que supone el 36,6 por ciento del total estatal, que roza los 282 millones, al tiempo que ha recordado que en la primera convocatoria la provincia de Huelva ha recibido 20 millones de euros de ayudas para la Estrategia DUSI, fondos que permitirá cofinanciar los proyectos presentados por los ayuntamientos de Huelva y Moguer.

Iglesias ha señalado que "son proyectos que han cumplido formalmente con los requisitos de la convocatoria y han logrado la puntuación necesaria para recibir estos fondos europeos, como así se recoge en la resolución del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas publicada el 3 de octubre en el Boletín Oficial del Estado".

DESARROLLO URBANO 2014-2020

La nueva programación de los fondos para 2014-2020 otorga una gran importancia al ámbito urbano. España, a diferencia de otros Estados europeos, ante la diversidad de sus municipios y el gran número de los mismos, ha optado por un procedimiento de convocatoria abierta a la que tuvieran acceso el mayor número posible de municipios de diversos tamaños o de agrupaciones de los mismos.

Con ello se pretende, por un lado, dar la oportunidad a los municipios de estar entre las mejores estrategias y resultar así adjudicatarios de la ayuda Feder y, por otro, que el mayor número posible de ciudades diseñen estrategias integradas a largo plazo, de las que podrán beneficiarse aunque no resultaran adjudicatarias de las ayudas. En definitiva, se trata de iniciar un cambio necesario en la planificación urbana en España.