Así, se ponen en el mercado diez parcelas de diferentes tamaños, "a precios muy competitivos, al tiempo que ofrece condiciones muy favorables para la inversión", con el objetivo de "seguir potenciando la oferta industrial y dinamizar la actividad empresarial de la ciudad de Logroño".

De este modo, se busca "cubrir las necesidades existentes y, con el suelo no adjudicado, disponer de una 'bolsa' en permanente disposición para las empresas" que pueda ser enajenado directamente o ser objeto de permuta.

Los contratos se adjudicarán por procedimiento abierto y tramitación ordinaria y el criterio de adjudicación será el alza en el tipo fijado de licitación para cada una de las parcelas.

Como también avanzó Gamarra, estas diez parcelas tienen de superficie entre 1.500 y 11.600 metros cuadrados con el fin de intentar cubrir las diferentes necesidades empresariales.

En total, se trata de 49.000 metros cuadrados de suelo industrial para atraer nuevas empresas y posibilitar que otras ya radicadas en la ciudad puedan trasladarse a una ubicación mejor, como es el caso de los PERIs de reconversión industrial a residencial que han sido delimitados en el casco urbano.

El Parque Industrial de Las Cañas goza de una excelente localización y accesibilidad, a lo que se suma un precio competitivo, entre 71 y 64 euros por metro cuadrado, beneficios fiscales o las condiciones de pago.

Así, las empresas que se instalen pueden beneficiarse de la política impositiva del Ayuntamiento de Logroño, con una bonificación en el Impuesto de Construcciones (ICIO) de un 30%; y una ventaja al ser una administración pública la vendedora: las firmas compradoras podrán acogerse a las ayudas de la ADER que llegan a cubrir hasta el 50% del valor del suelo.

Respecto a las condiciones de pago, puede ser realizado en un único plazo o en cinco a lo largo de cuatro años (el primero del 30% a los tres meses y el último del 25%, que deberá ser cubierto el 21 de agosto de 2020) a fin de conceder mayor liquidez a las empresas.

Además, para garantizar que la actividad para la que se enajenó la parcela se ponga en marcha a corto-medio plazo, existirá la obligación de presentar un proyecto de actividad, con la observancia de unos plazos: en los primeros 9 meses desde la adjudicación deberá solicitarse la licencia de obra y actividad; y a los doce meses, la licencia de primera ocupación. Además, en 5 años, el 30% de la actividad deberá estar en funcionamiento.