La iniciativa insiste en la necesidad de implementar medidas para minimizar los obstáculos a los que se enfrentan las mujeres que viven en zonas rurales, como los relativos a los problemas de financiación, la excesiva burocracia, las insuficientes infraestructuras de comunicación en transportes públicos y de conexión a Internet.

La Junta General señala también que conciliar la vida laboral, familiar y personal sigue siendo un reto para las mujeres del mundo rural y que por ello "se hace necesario incrementar las medidas que fomenten la conciliación, así como la sensibilización y concienciación de la corresponsabilidad entre hombres y mujeres en el hogar y en el cuidado de menores y mayores".

De esta forma, el texto pide "potenciar la figura de la titularidad compartida, fomentar su papel en la actividad emprendedora, destacar la acción de las mujeres como agentes de desarrollo sostenible, mejorar y actualizar el conocimiento de las mujeres en el medio rural, acabar con el silencio que rodea a la violencia de género en el mundo rural e incrementar la presencia de mujeres en la toma de decisiones".