durante el XXV congreso de esta entidad, que reunió a más de 3700 participantes de todo el mundo y se celebró entre el pasado 29 de septiembre y el 1 de octubre en París.

"Es un orgullo personal para un asturiano estar presente en estos foros internacionales", declaró el implantólogo tras su nombramiento. La presidencia de la EAO, fundada en 1991 y que aglutina actualmente a

17oo profesionales de todo el mundo, la ostentaba anteriormente el doctor sueco Björn Kinge.

El doctor Sicilia tiene claro cuál será el principal objetivo de su presidencia, que se prolongará durante cuatro años: "intentaré mejorar la comunicación de la investigación para cerrar la brecha que hay entre la ciencia y la práctica clínica", según ha informado la clínica Sicilia en una nota de prensa. "Y es que actualmente los ensayos reglados que permiten que una técnica se consolide y llegue al paciente tardan entre 10 y 15 años en desarrollarse", han añadido.

El implantólogo asturiano, para evitar esa dilación en el tiempo, quiere hacer "estudios on line abiertos y auditados por la Asociación Europea de Osteointegración, que permitirán aprobar tratamientos más novedosos en mucho menos tiempo", comenta.

Este nuevo cargo obligará al doctor asturiano, profesor universitario que regenta una clínica con más de 20 trabajadores, a viajar mucho más, aunque es consciente de que "las nuevas tecnologías me ayudarán a estar presente virtualmente en Paris, sede de nuestra asociación cada día".

El doctor Sicilia ya ha aportado una publicación de prestigio a la EAO, fundada en 1991, que sirve de referencia educativa para los implantólogos europeos, que fue realizado íntegramente en Asturias bajo su dirección

y que recientemente vio ampliada su difusión de forma ostensible, tras adquirir sus derechos una de las editoriales más importantes en odontología, Quintessence International.

Esta publicación on-line se puede consultar en la web de la EAO y en las de todo sus miembros -Clinica Sicilia (www.clinicasicilia.es)-. En principio estaba dirigida a los pacientes de implantes europeos y fue traducida a las cinco lenguas más importantes del viejo continente: inglés, francés, alemán, italiano y español. Sus lectores se vieron ampliamente incrementados tras ser traducida al japonés y dada su gran acogida se ha solicitado hacerlo también al danés,

ruso, chino y turco.