El rock urbano asalta esta noche la sala Razzmatazz de la mano de Rosendo, cantante y poeta costumbrista, que presenta su último trabajo El endémico embustero y el incauto pertinaz.

La gira promocional de este disco empezó a principios de julio en Cantabria y acabará "a tientas y barrancas” a finales de noviembre en Segovia, ofreciendo un total de treinta conciertos alrededor de España.

Treinta también son los años de carrera profesional que lleva Rosendo a sus espaldas. Guitarrista, cantante y compositor, es considerado uno de los pioneros y representantes del rocanrol autóctono, aquel género canalla forjado en las malas calles, que no se corta un pelo y ofrece en sus letras crítica al poder e historias cotidianas.

Mucha leña con Leño

Grupos como Los Suaves, Extremoduro o Reincidentes han seguido en esta línea estilística. El primer disco con el que se dio a conocer Rosendo fue con el grupo Leño (1975) que se convirtió en un referente y, allá por 1983, cuando el grupo cosechaba su mayor éxito, decidieron separase.

Así, Loco por incordiar empezó su carrera en solitario. Desde entonces y con éste último trabajo, Rosendo ya suma 17 álbumes que plasman diversas fases en su carrera musical, desde un contacto con el reggae en el disco Jugar al gua (1988) a sonidos mucho más duros, que podrían considerarse hardrock como Canciones para normales y mero dementes (2001) o Veo, veo, mamoneo (2001), pero siempre sin perder su sello de identidad.

Tanto que, este año, la Agrupación Local de Izquierda Unida de Guardo (Palencia) acordaba por mayoría entregarle el Premio a la Coherencia. En este último disco, Rosendo canta historias de la calle pero esta vez hace especial hincapié en la denuncia política y esta noche lo hará como siempre, de una manera directa y expresiva, listo para la reconversión, en la sala Razzmatazz.