Este martes 4 de octubre, el equipo de Días de cine, dirigido por Gerardo Sánchez y presentado por Elena S. Sánchez, inaugurará en Cineteca Madrid, a las 19:00 horas, una exposición de algunos de los contenidos más relevantes de estos 25 años.

La exposición, comisariada por Jesús Pamplona, permanecerá abierta hasta el día 23 de octubre, de martes a domingo, y está compuesta por obras de 38 artistas, que van desde el grafiti al videoarte, además de contenidos históricos del programa que podrán verse en cinco pantallas.

Y, a las 20:30 horas, tras el photocall con los más de 200 invitados que no se quieren perder esta cita, la proyección del especial por los 25 años del programa: '25 fragmentos de un discurso cinéfilo'. Un documental que es "una declaración de amor al cine y a Días de cine" -en palabras de su artífice, Raúl Alda, subdirector del espacio- a través de diferentes miradas, desde espectadores, a una profesora de historia que utiliza los reportajes en sus clases; de Ramón Colom, que decidió poner en marcha el programa; Antonio Gasset, director y presentador del espacio durante años; hasta los miembros actuales del equipo; directores de cine como Alberto Rodríguez; y actores como Javier Gutiérrez, Marian Álvarez o Isabelle Stoffel.

UN PROGRAMA DE CULTO

Un 6 de octubre de 1991, domingo, comenzaba la emisión de Días de cine. Dirigido por César Abeytua, duraba media hora, no tenía presentador, era en 4:3, y hacía un alarde de la mejor postproducción que la época permitía.

Con el tiempo llegó Aitana Sánchez Gijón, y luego Antonio Gasset, quien además dirigía el programa. Antonio Gasset fue el rostro del espacio durante trece años. Sus comentarios ya circulaban por Internet cuando las redes sociales no estaban ni soñadas. Días de cine se convirtió, poco a poco y casi sin darse cuenta, en un programa de culto, fruto del carisma y acidez de su presentador/director, pero también por la calidad del trabajo que surgía desde una redacción siempre entregada al cine.

Aquella media hora se convirtió en una hora. Los días cambiaron, del domingo inicial, Días de cine fue pasando por el sábado, el viernes, incluso los miércoles, hasta llegar a asentarse definitivamente los jueves y reunir cada semana a una gran comunidad de cinéfilos.