Tras las visitas efectuadas por el presidente del PP de Sevilla, Juan Bueno, y la parlamentaria andaluza Alicia Martínez a las tres residencias de titularidad de la Junta de Andalucía en la provincia de Sevilla, que se encuentran en Marchena, Heliópolis y Montequinto, Bueno ha lamentado que en Sevilla haya una lista de espera de más de 9.000 dependientes reconocidos "esperando recibir su prestación", mientras existen 3.147 plazas concertadas para dependientes, de las que solo 450 son de titularidad de la Junta".

"Es decir, la Junta de Andalucía sólo ofrece (directamente) el 14 por ciento de las plazas disponibles en residencias de mayores, el resto lo ofrece la iniciativa privada (mediante concierto). Por eso es muy preocupante el dato de que más de 9.000 dependientes reconocidos están esperando recibir su prestación", ha asegurado Bueno, que se ha preguntado "de qué blindaje del estado del bienestar hablan los socialistas y la señora Díaz".

"Mientras las plazas públicas disminuyen, los conciertos de puestos en centros privados han experimentado un importante aumento en los pasados años, aunque siguen siendo insuficientes. Sin embargo, la Consejería no sólo no tiene previsto concertar ni una sola plaza nueva más, sino que ni siquiera cubre las existentes, puesto que le sale más barato mantener las plazas vacías que el hecho de que un mayor sevillano la utilice".

Es lamentable, a su juicio, que "haya mayores sevillanos que no pueden acceder a una plaza, mientras en Gerena hay una residencia cerrada desde hace ocho años porque la Junta no concierta las plazas o que se mantenga a los trabajadores de Marchena en una precarias condiciones laborales, o que la de Dos Hermanas de Huerta Palacios sea una residencia nueva pero que se encuentre vacía y cerrada desde hace años".

Por su parte, en esta visita realizada a la residencia de grandes dependientes de Marchena, Alicia Martínez ha indicado que "nos preocupa la situación de los trabajadores públicos de la Junta de Andalucía de esta residencia, que se han venido manifestando por la precariedad en sus condiciones de trabajo"; y ha añadido que "los defensores de boquilla de lo público ni siquiera son capaces de garantizar unas condiciones de trabajo dignas, que se mantienen en otras residencias concertadas".

Martínez ha comentado que "la realidad es que es que los trabajadores de esta residencia se han manifestado porque no pueden más, llevan casi dos años trabajando en condiciones de sobre esfuerzo total, porque no se cubren las bajas, ni excedencias, ni las vacantes, ni les devuelven las horas extra y ni siquiera les pagan".