En un comunicado remitido a Europa Press, Fereclaes ha reiterado su oposición "radical" contra estos dispensadores "sin los mínimos requisitos legales que se exigen a las estaciones de servicio gasolineras convencionales.

La Federación ha lamentado que las recientes propuestas de la Comisión Nacional del Mercado y la Competencia den "cobertura" a este tipo de instalaciones "peligrosas para muchos ciudadanos de Castilla y León", como ancianos o discapacitados.

Además, advierten de que "ni los precios han bajado a causa de la implantación de este tipo de instalaciones, ni ha aumentado en ellas las medidas de seguridad, ni ofrecen facilidades de acceso a mayores y discapacitados".

"No nos oponemos a su implantación siempre que cuenten, permanentemente, con un empleado que facilite a estos colectivos el suministro de combustible", han advertido, para concluir que de esta forma se protegería "la libre competencia en el sector".