"Después de un largo y tortuoso camino que apuntaba a un fichaje de campanillas, hemos visto cómo se ha recurrido a la gestión tradicional de la sanidad asturiana", señala Llamazares, para quien debería haberse aprovechado el momento para, dijo, "abrir una nueva etapa no solamente en él área IV sino en el conjunto de la gestión sanitaria de Asturias, garantizando la consolidación del sector y también los cambios necesarios".