En un comunicado, Julián Moreno ha manifestado que este incendio, provocado de modo intencionado según las autoridades, constituye "un gran desastre ecológico", porque "principalmente, se han quemado encinas con más de un siglo de vida que forman parte de una zona catalogada como reserva de Biosfera por la Unesco y que también es conocida por ser la única zona en Sierra Morena en que se conservan truchas en las aguas del río Huesna".

"Todo apunta a que ha sido provocado por alguien, ya que se habla de varios focos, pero también somos conscientes de que los últimos años existen graves deficiencias en las labores tanto de prevención, como de extinción en los pequeños municipios de la zona", indica Moreno, quien señala que en el entorno de El Castillo de las Guardas, los incendios se han convertido en "una tónica" en los últimos veranos. En ese sentido, teme "intereses especulativos" tras estos incendios, ya que la última Ley estatal de Montes permite recalificar áreas quemadas.

Al respecto, expone que "la Diputación no puede evitar al 100 por ciento que alguien intente quemar una zona, pero sí que puede realizar tareas de limpieza mucho más eficientes". "Este incendio y muchos otros se podrían haber evitado si Sevilla no fuera una de las pocas provincias que no cuentan con un consorcio de bomberos que pudiera mejorar las labores de prevención y extinción en la zona", ha dicho igualmente Moreno, toda vez que tras un intenso debate político, la Diputación está en vías de constituir un consorcio para su sistema provincial de bomberos, donde se reclama además que la plantilla esté formada íntegramente por bomberos funcionarios, así como un refuerzo de sus recursos.

"A buenas horas, mangas verdes", ha expresado Moreno, que para concluir también ha denunciado los pocos efectivos que tienen los parques de bomberos de la zona norte, en el que junto a los pocos bomberos profesionales, se encuentran "otras personas sin la formación deseada".