Según ha indicado la Guardia Civil en una nota, la intervención se produjo cuando los guardias civiles, que se dirigían de vigilancia nocturna un punto de la costa, observaron en la avenida España de la Línea a un grupo numeroso de personas que estaban cargando fardos de hachís en tres vehículos que estaban subidos en la acera de dicho paseo.

Ante dicha situación delictiva, se identificaron como agentes de la autoridad, lo que hizo que los presuntos narcotraficantes abandonaran la droga en la acera, los conductores de los vehículos emprendieran la huida a gran velocidad y las personas que realizaban la carga salieran huyendo a pie, al amparo de la oscuridad de la noche, siendo perseguidos por los guardias civiles también a pie.

Por su parte, el conductor de uno de los vehículos huidos cambió el sentido de la marcha de forma sorpresiva, dirigiéndose directamente contra el vehículo oficial que estaba estacionado y sin ocupantes, al cual embistió en reiteradas ocasiones hasta empotrarlo contra una farola.

Posteriormente, según ha relatado la Guardia Civil, se dirigió hacia los agentes que estaban persiguiendo a pie a los narcotraficantes huidos con la manifiesta intención de atropellarlos, teniendo estos que saltar el muro de limitación de la playa con la acera para evitar ser atropellados y "salvar su vida", huyendo el vehículo a gran velocidad del lugar tras ver frustrado su intento.

Por todo ello, la Guardia Civil mantiene una investigación abierta para la detención de los narcotraficantes, tanto por los delitos contra la salud pública y contrabando como por homicidio frustrado al intentar atropellar intencionadamente a los guardias civiles y acabar con sus vidas.