La Policía Local de Lugo tiene clara la estrategia que se adoptará en los próximos días para presionar un aumento de sueldo que viene exigiendo desde hace meses. Entre estas medidas se encuentran no hacer refuerzos, solicitar, a título individual, bajas en los servicios voluntarios y algunos más harán "pitadas selectivas".

También se pondrá en práctica una política de "brazos caídos" para reclamar mejoras salariales, según ha informado un portavoz del colectivo inconforme.

Estas fueron algunas de las medidas acordadas por la plantilla policial durante una asamblea celebrada a última hora de la tarde.

En esta reunión se puso de relieve el "gran distanciamiento" que existe entre el Ayuntamiento y los negociadores de la Policía.

Los agentes de la Policía Local de Lugo aspiran a una equiparación salarial con otros cuerpos policiales y que se abone a todos los agentes los turnos de nocturnidad que en la actualidad tan solo cobran 14 de ellos que lo tienen reconocido por sentencia judicial, precisó el funcionario.

Efectividad mermada

Hasta ahora los agentes venían efectuando una pitada antes de cada pleno, pero tras esta asamblea harán pitadas selectivas en distintos puntos de la ciudad y ante eventos concretos.

Además, varios servicios verán mermada su efectividad, ya que agentes que patrullan en moto y otros que prestan su actividad en la sala de emergencias o de atestados optarán por renunciar a ese puesto que tiene carácter de destino voluntario.

Todas estas medidas se adoptarán si no se alcanza antes un acuerdo y coincidirán con las próximas fiestas de Lugo, que se celebrarán el 4 al 12 de octubre.

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