A su juicio, las roturas de los emisarios de Peñarrubia y Aboño "evidencian el desinterés del Gobierno asturiano" ante la contaminación marina. El parlamentario ha pedido conocer los valores de las diferentes mediciones realizadas en el entorno de emisarios de Peñarrubia y Gijón Oeste desde enero de 2013, y de cuántos y cuáles emisarios de aguas residuales tiene constancia el Ejecutivo que se encuentren dañados, así como cuándo piensa tomar medidas para que sean reparados.
El emisario roto de Gijón Oeste, continúa en una nota de prensa, evidencia "una tónica general de despreocupación ante la contaminación de aguas similar a lo que llevamos meses discutiendo sobre la calidad del aire en la zona central de Asturias".
Para Piernavieja, lo más preocupante de todo "son las evidencias de que la Consejería ya conocía el estado de estos emisarios hace años".
"Es humillante para nuestra comunidad autónoma que, ante un problema tan grave como el vertido al mar de aguas residuales sin tratar, únicamente se actúe cuando salta el escándalo a la luz pública", ha criticado.
Sobre las afirmaciones de la consejera de Medio Ambiente, Belén Fernández, de que el Cantábrico es "una depuradora natural", Piernavieja la ha invitado a informarse más ya que "el mar no 'autodepura' sino que diluye parte de los contaminantes, hasta que, como cualquier disolución, alcance su punto de saturación".
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