Chavarría, que ha ofrecido una rueda de prensa en el consistorio junto a la concejala de Urbanismo, Ana Bru, y a los representantes de Marenostrum, Cristina de Maya y Rubén Gavidia, ha afirmado que la denuncia de Compromís "está fuera de lugar" y ha "precipitado" el informe negativo y preceptivo de la Subdirección general de Costas y de la Conselleria, que el 5 de julio comunicó al Ayuntamiento que las obras en la zona del festival debían paralizarse tras detectar que las actuaciones podían incumplir dos artículos de la Ley de Costas.

Al respecto, el primer edil ha criticado la tardanza de la Conselleria en ofrecer los informes técnicos sobre el emplazamiento del certamen, ya que según ha indicado, en el mes de enero se dirigieron a la administración autonómica para que aportase su postura, que no han trasladado hasta hace dos días y que ha resultado negativa a la celebración del festival. Ante estos hechos, el consistorio ha presentado alegaciones que la Conselleria estudiará "pormenorizadamente".

"Este Ayuntamiento no puede autorizar un evento si no tiene todos los informes favorables", ha destacado Chavarría, quien ha asegurado que otros organismos como el Servicio de Carreteras de la Conselleria de Medio Ambiente, la demarcación de Costas del Ministerio, la Confederación Hidrográfica del Júcar o la Diputación han aportado su visto bueno al emplazamiento previsto, una zona "degradada", según el alcalde, que la empresa organizadora del evento ha limpiado.

"Nosotros somos abanderados del Pla de l'Horta", ha defendido el primer edil", quien ha remarcado que "nadie puede ponerse la etiqueta de 'salvem l'Horta'" sin el equipo de gobierno y ha calificado de "intransigente e irreconciliable" la postura de Compromís.

"ZONA MARGINAL Y PELIGROSA"

En esta línea se ha pronunciado también la concejala de Urbanismo, Ana Bru, quien ha apuntado que en el paraje de Els Peixets -junto a la playa del Miracle y una zona de l'Horta- "había vertidos de todo tipo" y se "estaba convirtiendo en una zona marginal y peligrosa". Al respecto, ha indicado que este espacio, propiedad de particulares y del Ministerio, se ha limpiado por parte de la empresa del festival.

"Consideramos injusto que digan que nos hemos cargado el paraje", ha lamentado Bru, quien ha añadido que los responsable de Marenostrum "han cumplido", pues han adecuado el terreno. "Aquí ni ha habido mala intención del Ayuntamiento, ni de la empresa; se ha actuado con la conciencia clara de hacerlo bien", ha defendido la concejala.

LA EMPRESA PEDIRÁ RESPONSABILIDADES A CONSELLERIA

Por su parte, la apoderada mayoritaria de Marenostrum, Cristina de Maya, ha asegurado que la organización pondrá en marcha el plan de actuación correspondiente tras la cancelación del evento e intentará devolver el dinero de las entradas a las más de 17.500 personas que la habían adquirido, a quienes ha agradecido su "apoyo" al festival.

Asimismo, ha anunciado que pedirán responsabilidades al servicio de Costas de la Conselleria por la negativa a la celebración del evento.