Los residentes de las viviendas cercanas a la Laguna de Torrox siguen teniendo como vecina a la cría de cocodrilo que avistaron hace poco más de una semana.

A pesar de los numerosos intentos de los agentes de la Policía Local, vigilantes de Medio Ambiente y personal del Zoo (todos coordinados por el Servicio de Protección de la Naturaleza), el ejemplar sigue suelto. Desde disparos hasta carne fresca han sido los métodos utilizados por las autoridades para intentar apresarlo y todos con nefastos resultados.

Por ello, ayer se decidió recurrir a lo que se ha denominado como "el plan B" y, tras recibir prestada una red de trasmallo de una empresa pesquera de la cosa gaditana, se decidió intentar pescar, literalmente, al cocodrilo.

De hecho, según informó Medio Ambiente, ayer la red se colocó en el fondo de la laguna para, más tarde, proceder a retirarla y que arrastrara con ella todo aquello que hubiera a su paso. No osbtante, parece que esta nueva técnica tampoco ha dado los frutos esperados.

Mientras tanto, los vecinos y curiosos se acercan para comprobar que las zonas cercanas a la Laguna de Torrox continúa cercada y la inquietud comienza a apoderarse de aquellos que tienen sus casas a pocos metros de donde se asegura haber visto al cocodrilo.

De hecho, se ha llegado a especular con la presencia de más de un ejemplar en este área jerezana. Un rumor que la propia delegada de Medio Ambiente, África Becerra, quiso zanjar: "sólo hay confirmado un cocodrilo", sentenció.

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