Según informa el Instituto Armado en un comunicado, el ahora detenido presentó días antes una denuncia por robo con violencia en el puesto principal de la Guardia Civil de Utrera en la que relató los hechos "de forma muy vaga", por lo que los agentes decidieron repetir la toma de declaración al suponer que el denunciante se encontraba "en estado de shock" por las lesiones sufridas.
Ante la persistencia de las contradicciones y vaguedades registradas en la segunda declaración, los agentes decidieron iniciar una investigación con la sospecha de que la denuncia pudiera estar relacionada con un "ajuste de cuentas" relacionado con el tráfico de drogas.
En el marco de esta investigación, y con el consentimiento del detenido, la Guardia Civil procedió al registro de un taller de herrería de su propiedad en la carretera de El Palmar de Troya, donde se localizaron varias dependencias habilitadas para el cultivo y recolección de marihuana, provistas de humidificadores, focos, ventiladores o sistemas de extracción de aire.
Durante el registro se encontraron, repertidas por tamaños, un total de 573 plantas de marihuana y 2.070 gramos de cogollos de la droga además de otros efectos y útiles relacionados con esta actividad ilícita.
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