En declaraciones a Europa Press, Mendiola ha explicado que Izquierda Unida, como organización, no comparte la decisión de la Asamblea de Fuenmayor porque supone "apoyar al Partido Popular"; un partido que "siempre ha defendido lo contrario a los planteamientos de IU". Pero, ha dicho, "el PSOE también tiene mucha responsabilidad".

Así, ha señalado que Fuenmayor es una "anomalía en lo político" porque el PSOE "se cree que es su cortijo". Ha explicado que, aunque ha ido "perdiendo apoyos", no ha sido capaz de "reflexionar" sobre ello.

De hecho, ha recordado que la situación viene de lejos, dado que ya en el año 2006 IU y PP estuvieron a punto de presentar una moción de censura al PSOE que, sin embargo, no prosperó porque el PP "se echó atrás", cosa que, ahora, no ha sucedido.

En cualquier caso, ha insistido en que la dirección de IU no apoya la decisión de la Asamblea de Fuenmayor, y esperará a que ésta de las oportunas explicaciones en el pleno que se celebrará el próximo 8 de julio, "de forma sucinta y detallada".

En cuanto a si tomará alguna medida ha preferido "ver cómo se va desarrollando la situación" para no tomar una decisión "de forma precipitada".

También ha advertido al PSOE de que "no va a marcar los tiempos" a Izquierda Unida, al tiempo que le ha acusado de "actitud bonapartista" y de "querer condicionar". "No se puede tratar a la gente de Izquierda Unida como a una mera sucursal para que esté calladita y a plena disposición", ha dicho.

En este sentido, ha señalado: "Me hice cargo hace medio año de la coordinación, y a pesar de la situación catastrófica de Fuenmayor no he recibido ningún tipo de propuesta del PSOE para reconducir la situación".