Los hechos tuvieron lugar cuando la mujer aparcó su vehículo en una vía urbana con acusada inclinación, concretamente en la calle Barbo de la Urbanización Nuevo San García, y, al bajarse del vehículo advirtió que descendía cuesta abajo ya que había olvidado accionar el freno de mano. Se metió rápidamente en el vehículo para pararlo, pero debido al fuerte estado de shock en el que se encontraba solo podía gritar, mientras mantenía la puerta abierta y medio cuerpo fuera.

El sargento de la Guardia Civil perteneciente al Puesto de San García de la Comandancia de Algeciras al observar como el vehículo avanzaba sin control por la cuesta abajo, corrió hacia el turismo, lo alcanzó y accedió a su interior.

Tras comprobar que el freno de mano no funcionaba, salió del coche y agarrándose al marco de la puerta frenó el turismo con su cuerpo, consiguiendo detenerlo a escaso medio metro de caer por el terraplén.