Fue a finales del pasado año cuando una de las empresas ubicadas en San Claudio cesó en su actividad en las naves industriales que tenía el dicha localidad. Parte del personal continuó realizando labores de reacondicionamiento.
La Guardia Civil de Oviedo, a sabiendas que en dichas instalaciones quedaba en su interior material de valor, realizó periódicamente servicios de prevención por la zona con el fin de evitar cualquier hecho delictivo.
Durante esos servicios esporádicos la Guardia Civil observó en distintas ocasiones y siempre en horario nocturno, la presencia de dos turismos un Renault Megane y un Clio, comprobando que los conductores de ambos vehículos eran amigos y residían en Langreo
además poseen varios antecedentes por delitos contra el Patrimonio (robos).
El pasado mes de febrero el encargado denunció el robo del interior de la nave de más de 300 kilogramos de cableado eléctrico, así como la sustracción de una furgoneta marca Citroen modelo C-15 propiedad de la empresa.
Los agentes localizaron a las 17,30 de ese mismo día, la furgoneta Citroen C-15 sustraída completamente calcinada en un camino poco transitado de la localidad de Sorribayu, en Siero.
De las gestiones practicadas por la Guardia Civil y tras realizar varias visitas a distintos centros de reciclaje de metales, finalmente procedieron a la detención de esas dos personas y a la imputación de otro hombre como
supuestos autores de delitos contra el patrimonio (robo con fuerza), daños y robo.
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