Según indica la Comisaría en una nota, sobre el condenado pesaba una reclamación judicial de búsqueda, detención e ingreso en prisión después de que se fugara a finales del pasado año cuando debía ingresar en prisión en ejecución de la sentencia.

En el momento del arresto, el detenido acometió con violencia y golpeó a los agentes, que tuvieron que efectuar un disparo al aire para proteger su integridad física y depusiera su actitud. Además le constan antecedentes por robo con violencia en los que empleó un arma de fuego y por atentado a agente de la autoridad.

La detención se produjo después de que el pasado 15 de junio se estableciera un dispositivo en torno a la vivienda familiar de la pareja sentimental del arrestado, donde el fugitivo permanecía escondido desde hacía meses.

Cuando el prófugo se percató de la presencia de la Policía, se enfrentó a los agentes a los que acometió y golpeó violentamente. Ante el peligro para su integridad física, un agente se vio obligado a efectuar un disparo al aire intimidatorio para que depusiera su actitud agresiva, con lo que logró su objetivo y se pudo proceder a la detención.

El arrestado es un individuo de gran corpulencia, practicante de las llamadas artes marciales mixtas y está considerado como muy peligroso. Ahora, ingresará en prisión para cumplir condena junto con otros dos hombres -entre ellos su hermano- que fueron condenados por los mismos hechos.

En concreto, los tres agredieron sexualmente en 2009 a una joven británica a la que conocían y a la que abandonaron en las inmediaciones del Castillo de Santa Ana en Roquetas de Mar (Almería) tras la violación, que consumaron en una vivienda en ruinas.

La investigación ha sido desarrollada por agentes del Grupo de Localización de Fugitivos Nacionales y de la Unidad Familia Mujer (UFAM) de la Comisaría de la Policía Nacional en El Ejido. Para la detención se ha contado con la colaboración de la UPR también de la Comisaría del Ejido.