En una nota, el Ayuntamiento ha explicado que, tras la inspección, se ha decidido que tres de las cuatro viviendas continúen desalojadas por el estado en que han quedado tras el incendio. Ha concretado que la vivienda en la que se originó el fuego se encuentra "siniestrada", mientras que las otras dos -situadas enfrente- han sufrido daños en el sistema eléctrico, con el consiguiente riesgo de cortocircuito, además de otros daños de carácter menor como pueden ser acumulación de hollín y desperfectos en enseres por las altas temperaturas alcanzadas.

La cuarta vivienda de la planta, que había sido desalojada de forma preventiva por los Bomberos, no presenta daños significativos, salvo la puerta de entrada, con lo cual, una vez sea reparada se podrá habitar.

Asimismo, y como resultado de la inspección, "no parece que las viviendas hayan sufrido daños estructurales", aunque en el salón de la vivienda en la que se originó el incendio se han colocado puntales al objeto de poder hacer un seguimiento de la evolución del forjado, como medida preventiva.

También las zonas comunes del edificio se han visto afectadas por el incendio, principalmente el sistema eléctrico y los revestimientos de techos y paredes de la cuarta planta.

En Ayuntamiento ha apuntado que el área de Igualdad, Acción Social y Medio Rural ha desplazado una trabajadora social a la zona al objeto de valorar la situación de emergencia planteada a raíz del incendio, y se ha atendido a las familias afectadas, ofreciéndoles apoyo y colaboración en caso de necesitar algún tipo de alojamiento. No obstante, estas personas se encuentran realojadas en viviendas de familiares.

Asimismo, se hará un seguimiento de la situación que permita dar respuesta a las posibles demandas que se puedan plantear, que sean de primera necesidad y dentro de los recursos disponibles.