En cuanto a los datos económicos de la campaña, teniendo en cuenta que cada kilo de corcho cuesta recogerlo en el campo entre 0,10 y 0,20 euros, esto supondrá un movimiento en jornales de descorche de entre 5 y 7 millones de euros.

Después, el precio del kilo sin transformar varía entre 1 ó 1,20 euros, por lo que "supondrá un movimiento de unos 28 millones de euros", según ha señalado Ramón Santiago, ingeniero de Montes del Instituto del Corcho, la Madera y el Carbón Vegetal integrado en el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (Cicytex), que ha participado, junto a otros expertos en unas jornadas que han tenido lugar este lunes en Cáceres, organizadas por Asaja Extremadura.

Tras la recogida y la venta llega la transformación, que no toda se realiza en Extremadura, y que aporta un valor añadido al producto, por lo que Santiago ha señalado que, en el conjunto del sector, la actividad económica que genera el corcho puede rondar los 60 millones de euros.

Cabe recordar que Extremadura es la segunda comunidad productora de corcho, detrás de Andalucía, lo que supone el 11,6 por ciento de la producción mundial. La producción anual depende de los turnos de saca, ya que los alcornoques se descorchan cada nueve años en la región, y las condiciones climatológicas. Este año en cuanto a producción será una campaña "media" pero en cuanto al clima será "excepcional", ha dicho Santiago.

En las jornadas se ha puesto de manifiesto que según los datos registrados en la última subasta público celebrada en el mes de abril en Rabat (Marruecos), se vendió todo el corcho en plancha (el que se utiliza para la industria taponera), además del corcho en trozos y bornizo, lo que supone un total de 10.816 toneladas.

Esta subasta marroquí sirve de referencia al sector al ser una de las operaciones comerciales de mayor volumen y por el carácter público de la venta ya que, en este país norteafricano es el propio gobierno el que gestiona la superficie forestal.

INVESTIGACIÓN

En esta jornada también ha participado la directora general de Cicytex, Carmen González, quien ha destacado las líneas de trabajo que se desarrollan en este centro de investigación relacionadas con la mejora de la productividad y sostenibilidad de los sistemas forestales.

González ha explicado que la región estudia nuevas aplicaciones del corcho, procesos tecnológicos para mejorar la industria del corcho y "todo lo que demande el sector ya que el objetivo del centro es estar a disposición de las empresas y dar respuesta a sus necesidades", ha subrayado en un encuentro con los medios de comunicación.

Precisamente, uno de los estudios destacados es el de la enfermedad de la seca en encinas y alcornoques extremeños. En relación con este tema, el investigador de Citycex Enrique Cardillo, explicó que un dos por ciento de la superficie de dehesa está afectada por esta enfermedad que produce que los árboles se vayan secando poco a poco.

Cardillo ha indicado que desde el centro de investigación se trabaja para "parar" la enfermedad con técnicas de mejora en la detección de la seca, así como refuerzo de la resistencia de las especies tanto a nivel genético como fitosanitario y también se trabaja en medias de control, aunque todavía "no existe un método" para acabar con la seca, ha concluido.