Así lo ha indicado en declaraciones a los medios el presidente de la junta de personal del consorcio, Alejandro Raymond, quien ha señalado que con los cambios normativos la ratio se sitúa en un bombero por cada 5.000 habitantes mientras que la media de España es de un bombero por cada 1.600 habitantes.

No obstante, ha destacado que la principal preocupación de los bomberos están en el aumento de los tiempos de respuesta, que pueden alcanzar "incluso los 50 minutos", lo que no les permite desarrollar su labor "de forma eficaz".

"No somos operativos", ha apostillado Raymond, quien ha recordado que una respuesta rápida es importante para atender la evolución de un incendio. Con esto, ha incidido en que la situación para algunos municipios como Roquetas de Mar, donde con una población superior a los 100.000 habitantes en verano, hay "muchos siniestros" que se atienden con "tiempos de respuesta muy malos debido a las malas comunicaciones".

Por su parte, el secretario de la junta de personal, José Luis Martín, ha añadido que la merma en la plantilla para la confección de los turnos puede hacer que una zona quede "más desprotegida" en caso de que se den varios siniestros al mismo tiempo, ya que ante un incendio suele desplazarse una dotación de siete efectivos que deja únicamente a dos en el parque en reserva.