El tribunal de la Sección Tercera considera probado en su sentencia, consultada por Europa Press, que Moya González, justo antes de desaparecer con la niña y después de que los tres pasaran una "fría noche" en el interior de su turismo, las llevó a un lugar deshabitado y con un escaso tránsito de personas y una vez allí, "ató con una cuerda por detrás de la espalda las manos a Gema Cuerda" y la atacó "haciendo caso omiso a sus peticiones para que no lo hiciese".
En el acto de juicio, el acusado negó que agrediese sexualmente a la madre de la niña momentos antes de secuestrarla o que mantuviese relaciones sexuales con ella durante las más de 48 horas en las que estuvieron deambulando en su vehículo por carreteras secundarias y parajes rurales. "Yo no tenía cuerpo para eso, no era además la situación, afirmó.
Por su parte, la víctima relató que la violación se consumó en un paraje donde había olivos y otros árboles y que él aprovechó que se "agachaba para colocar a la niña en suelo para que jugara con las flores" para "cogerme los brazos por detrás, amarrarme las manos con la cuerda de tal manera que no me podía soltar, bajarme los pantalones, agarrarme de la coleta del pelo mientras me decía que eso le daba mucho morbo, apoyarme contra una roca y hacerlo".
(HABRÁ AMPLIACIÓN)
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios