Los detenidos son tres hombres de 19, 37 y 48 años con domicilio en la provincia de Salamanca (dos de ellos padre e hijo), según la información facilitada a Europa Press por fuentes de la Comandancia Provincial.

En el registro de la vivienda empleada para el cultivo de la sustancia estupefaciente, los agentes localizaron en el sótano dos habitaciones "perfectamente preparadas" como invernaderos para el cultivo de Cannabis Sativa', donde intervinieron las plantas con un peso bruto de 34,7 kilogramos.

Además, el Instituto Armado recogió en ese mismo lugar 24 focos alógenos para cultivo, tres extractores de aire, 26 transformadores de corriente, cuatro temporizadores y otros "efectos propios para el cultivo y preparación del producto".

En el marco de la operación 'Patu', los agentes descubrieron que los responsables de la plantación habían manipulado la acometida eléctrica para "reducir gastos" en el gasto de energía para obtener un crecimiento rápido de las plantas

La Guardia Civil ha explicado que la investigación se inició en enero y que, posteriormente, los agentes pudieron comprobar que en la vivienda vigilada no residía ninguna persona.

DETENCIONES

No obstante, a ella se acercaban periódicamente los ahora tres detenidos para llevar a cabo las actividades de cuidado de las plantas, trasladar elementos para su cultivo o recoger la marihuana para su posterior venta.

Tras establecer un dispositivo de vigilancia, los agentes pudieron en marcha el pasado 16 de mayo el operativo para acabar con los hechos, que se alargó hasta el 17 de mayo, cuando detuvieron a las tres personas.

La operación ha sido llevada a cabo por agentes pertenecientes al Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Salamanca.