De acuerdo con sus datos, la "Operación Gracurris" se inicia en febrero de 2016, tras cometerse un robo con fuerza en una vivienda de Alfaro (La Rioja), en el que autores desconocidos, tras forzar una de las puertas, accedieron al interior y sustrajeron obras de arte y antigüedades valoradas en más de 40.000 euros.
Entre estos efectos se encuentran 11 cuadros de diferentes siglos, algunos de ellos con marcos bañados en oro, relojes antiguos, figuras de imágenes religiosas, objetos de bronce y cobre, baúles, etc.
Las diferentes actuaciones llevadas a cabo por el Equipo de Policía Judicial y por el Puesto de Alfaro permiten averiguar la salida al mercado de dos de los cuadros sustraídos, que habían sido adquiridos por un anticuario al desconocer éste su ilícita procedencia.
Con el paso de las semanas, los investigadores han logrado identificar a los presuntos autores del robo, así como localizar el inmueble donde pueden estar guardadas las obras de arte sustraídas.
Una vez se concedió la autorización judicial para la entrada en el citado inmueble, se accedió al interior, recuperándose la práctica totalidad de las antigüedades sustraídas, que han sido devueltas a su legítimo propietario.
Los tres detenidos, tras ser oídos en declaración, han sido puestos a disposición de la autoridad judicial.
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