Un ataque en un cuartel militar en el archipiélago de Cabo Verde se saldó con once fallecidos, dos de ellos de nacionalidad española, han confirmado fuentes diplomáticas.

El ataque al cuartel de Monte Tchota se produjo la pasada madrugada en la localidad de Rui Vaz, en la isla de Santiago, la principal de este archipiélago, antigua colonia portuguesa situada a unos 1.500 kilómetros de las Islas Canarias españolas.

Las mismas fuentes ratificaron la información del Gobierno caboverdiano, en el sentido de que no se trata de un ataque terrorista ni tampoco de un suceso vinculado al narcotráfico, como se había apuntado en un primer momento.

Según el ministro de Administración Interna caboverdiano, Paulo Rocha, el responsable de lo ocurrido es un soldado, que se encuentra en paradero desconocido, y que actuaría por motivos personales.

Además de los dos españoles, en el mismo suceso también han fallecido nueve caboverdianos (ocho militares y un civil).

"El país está conmocionado, las personas están muy alarmadas. Aquí es raro que sucedan episodios como éste", agregaron las fuentes periodísticas.

Los dos españoles fallecidos eran técnicos de telecomunicaciones y no turistas. Sus identidades no se han revelado, pero se trata de dos hombres de 31 y 51 años de edad que realizaban labores de mantenimiento.

En el momento del ataque había en el cuartel otro ciudadano español que consiguió escapar sano y salvo.

El propio ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, se puso en contacto con la embajadora de España en Cabo Verde, Caridad Batalla Junco, para conocer los detalles del suceso nada más aterrizar en la base aérea de Torrejón (Madrid) la noche de este martes.

Margallo procedía de Kazajistán y Azerbaiyán a los que realizó una visita oficial para asistir en este último país a la apertura del Foro de la Alianza de Civilizaciones y entrevistarse con su presidente, Ilham Aliyev.