La intervención se produjo sobre las 09.25 horas del viernes, cuando M.H.D., de nacionalidad iraní y 48 años, pasajera de un autobús de línea regular procedente de Andorra, pretendía introducir sin declarar el dinero que llevaba en el interior de un bolso de mano, ha informado este lunes la Guardia Civil en un comunicado.

La mujer continuó viaje con 1.000 euros, en concepto de "mínimo de supervivencia" y el resto del dinero se quedó en la Aduana de la Farga de Moles a disposición de la Comisión para la Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias del Banco de España.