Castilla y León ha reconocido este jueves la labor de los miembros de la unidad Tedax-NRBQ del Cuerpo Nacional de Policía cuando se cumplen 40 años de su fundación, cuatro décadas "de compromiso con los españoles y la sociedad española".

Así lo ha destacado el comisario jefe de la Unidad Central Tedax-NRBQ, Javier Navalmoral Sánchez, quien ha asistido al homenaje celebrado en la comisaría del barrio vallisoletano de Parquesol.

En declaraciones recogidas por Europa Press, Navalmoral ha subrayado la "importancia enorme" de esta unidad en la lucha contra el terrorismo, "no sólo en la desactivación de explosivos, sino también en la investigación que permite la detención de los terroristas".

En cuanto a la situación actual de los Tedax, el comisario jefe ha advertido de que, a pesar de que el país se encuentre ahora en nivel cuatro de alerta antiterrorista, "nunca" han dejado "de estar en alerta".

La delegada del Gobierno en Castilla y León, María José Salgueiro, ha presidido el acto de celebración, donde ha estado acompañada por los subdelegados de Valladolid y León, las dos provincias de la Comunidad que cuentan con miembros Tedax y desde donde prestan servicio al resto.

En el acto también han estado presentes el jefe superior de Policía de Castilla y León, Javier Peña Echeverría; el general de la IV Subinspección del Ejército, Manuel Ángel Gorjón; el jefe de la Comandancia de la Guardia Civil en Valladolid, el teniente coronel Juan Miguel Recio, y el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Valladolid, Pablo Trillo.

Lucha contra el terrorismo

En su intervención, Salgueiro ha mostrado su gratitud a los agentes por "una vida de reconocido y valeroso trabajo en la lucha contra el terrorismo", al tiempo que ha definido el carácter de los agentes de esta unidad como una suma de "estabilidad, control emocional, capacidad de concentración y de observación, análisis y toma de decisiones; un acentuado sentido de la disciplina y plena disposición hacia el servicio".

La delegada ha recordado el riesgo que asumen sus miembros, ejemplificado en su lema, "el primer error es el último", para después resaltar que España fue el primer país europeo en contar con este tipo de unidades, fruto de la presión terrorista que vivía entonces, en 1975. En 1979 comenzaron su singladura los grupos de Desactivación de Explosivos con base en Valladolid y León, mientras que en diciembre de 2004 se unieron a esta especialidad las competencias sobre incidentes NRBQ (riesgo nuclear, radiológico, bactereológico y química.

Los miembros que han conformado los grupos a lo largo de estos últimos cinco años han hecho frente en Castilla y León a 202 intervenciones que comprenden artefactos explosivos reales, proyectiles y artificios de origen militar y falsas alarmas, además de establecer un continuo seguimiento preventivo de todas las infraestructuras críticas y objetivos sensibles.

Estos Grupos de Desactivación de Explosivos de la Policía Nacional en Castilla y León han participado en misiones internacionales en El Salvador, México, Rumanía, Perú, Kuwait, Irlanda, Brasil y Estados Unidos, abarcando facetas diferentes que van desde la formación a cuerpos policiales, investigación de atentados, colaboración con misiones diplomáticas, participación en grupos de trabajo o desactivación y destrucción de arsenales de guerra.

Durante el acto de este jueves, se ha homenajeado especialmente a los agentes jubilados Mauricio Melgar Téllez, Bernardo Martínez Rodríguez, Nazario García Borrego, Cesáreo Llorente Hernández, Manuel Martínez Canales, Antolín Yugueros Méndez y Gregorio Martín Escalero, así como al fallecido agente Pedro Güezmes Centeno, cuya viuda, María Cruz Rodríguez Reglero, ha sido la encargada de recibir el reconocimiento.