Los reclusos fueron detenidos a las 01:45 horas del 5 de septiembre después de que en la avenida Primero de Mayo emprendiesen una veloz huida en un turismo Seat Ibiza que pertenecía a un recluso, al que le quitaron las llaves del vehículo forzando su taquilla de la prisión.

La persecución siguió por los barrios murcianos de Vistabella y el Polígono de La Paz, saltándose los semáforos e incumpliendo todas las normas de tráfico, sin que afortunadamente se registrase ningún accidente.

Ya en la carretera de Alicante conducían a velocidad elevada, con las luces apagadas y en sentido contrario de la circulación, siendo interceptados por la policía cerca de Casillas.

Los detenidos cumplían condena en régimen de tercer grado y se habían fugado después del recuento de presos y aprovechando un descuido, momento en el que salieron al patio y saltaron el muro que circunda el recinto