Salut quiere que los enfermeros catalanes sigan prescribiendo medicinas y vacunando

El departament de Salut ha llegado a un preacuerdo con cuatro colegios profesionales de enfermería catalanes para crear un decreto para que estos profesionales sanitarios puedan seguir prescribiendo determinados medicamentos y vacunando a pacientes sin la necesidad de la autorización de un médico. De esta forma, el Govern quiere preservar esta actividad del colectivo, habitual tanto en la atención primaria como en la hospitalaria, que ha quedado mermada desde la publicación del Real Decreto del Gobierno central en diciembre de 2015 .

El conseller de Salut, Toni Comín, confirmó este miércoles que dicho preacuerdo debe consensuarse ahora con los colegios oficiales de médicos de Cataluña para llegar al rango de acuerdo y, posteriormente, al de ley. Esta no chocaría con la legislación española sino que sería «una interpretación» de la normativa estatal, asegura el departament. Por ello, dijo Comín, difícilmente podría ser 'tumbada' por Madrid, afirmó.

Para que los enfermeros puedan seguir recetando, el decreto catalán prevé la creación de la figura de la «acreditación» de los enfermeros para dicha actividad, bajo la supervisión de un médico. Dicha validación estará sujeta al conocimiento de determinados protocolos de colaboración que los habilitan para dicha función prescriptora. Para suministrar medicamentos no sujetos a prescripción médica no será necesaria esta acreditación, comentó Comín.

Salut también creará próximamente una comisión de práctica asistencial junto a la Agència de Qualitat i Avaluació Sanitàries de Catalunya (AQuAS) y los consejos de colegios de enfermería y de médicos. Por su lado, un total de 53 entidades de enfermería han anunciado movilizaciones para el próximo 7 de abril contra el Real Decreto español.

El departamento de Salut recurrió en febrero el decreto del Gobierno que limita la capacidad de las enfermeras para recetar medicamentos y productos sanitarios. Salut pide la suspensión de dos de los artículos del decreto, concretamente se opone a que las enfermeras necesiten de la autorización de un médico para poder recetar.