El conseller de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, Vicenç Vidal, ha entregado este miércoles los distintivos ambientales EMAS a los establecimientos, empresas y servicios que se han adherido o que han renovado la acreditación a estos sistemas europeos de gestión ambiental.

El distintivo EMAS, acrónimo de Eco-Management and Audit Scheme (Sistema de Gestión y Auditoría Ambientales), lo otorga la Comisión Europea a las empresas y organizaciones que implantan, de manera voluntaria, un sistema de gestión integral basado en criterios medioambientales.

Este año se han entregado treinta y cinco placas a doce empresas, entre las cuales hay una nueva organización y el resto renuevan esta distinción.

Así, se incorpora al club de las buenas prácticas y la calidad la entidad Espacios Limpios Mallorca.

Al mismo tiempo, Gráficas Planisi, Cemex España, Club de Mar, Melchor Mascaró, Hotel Azul Privilege Oporto Petro, Brillosa, Industria Gráficas Mallorquinas, Construcciones Salvador Pastor, el aeropuerto de Menorca, Contratación Integral de Servicios de Neteja y Air Europa han renovado esta acreditación hasta el 2018, esta última empresa para 24 de sus centros.

Vidal ha dado la enhorabuena a todos los distinguidos y les ha agradecido "el esfuerzo y la implicación para implantar la calidad, las buenas prácticas y la sostenibilidad ambiental en sus establecimientos".

La Dirección General de Educación Ambiental, Calidad Ambiental y Residuos, por medio del programa ECOTUR, es la encargada de promover la implantación voluntaria de este instrumento a las organizaciones públicas y privadas de las Islas Baleares.

Un total de 91 CENTROS

De hecho, a la comunidad autónoma, 45 entidades, con 91 centros, ya han obtenido el distintivo EMAS, que en el archipiélago se empezaron a otorgar el año 2000.

El director general del área, Sebastià Sansó, también ha agradecido el esfuerzo de estas organizaciones y la implicación tanto de grandes empresas como de pequeñas empresas.

En este sentido, ha subrayado que a pesar de la crisis de los últimos años, la bajada de entidades certificadas ha sido poco significativa, y ha valorado positivamente la voluntad para mantener los estándares de calidad, sostenibilidad y buenas prácticas ambientales.