Más de 30 mujeres han participado en el taller 'Osteoporosis: una enfermedad de todos' impartido por la médico de familia de la Unidad de gestión Clínica de Bujalance del Distrito Sanitario Córdoba y Guadalquivir, Myriam Berzas.

Así lo ha indicado la Junta de Andalucía en un comunicado en el que ha señalado que esta actividad se enmarca en la Semana de la Mujer organizada por la Asociación Fuente Agria con la colaboración de Salud, el Ayuntamiento de Villafranca (Córdoba) y la Diputación provincial.

El objetivo de este taller ha sido dar a conocer a la población la osteoporosis y fomentar medidas para prevenir esta enfermedad y mejorar la calidad de vida de las personas. Se realiza dentro de las actividades en conmemoración del día de la mujer dada la incidencia de ésta patología en el sexo femenino (las mujeres tienen un riesgo cuatro veces mayor que los hombres de desarrollar osteoporosis, especialmente tras la menopausia).

Aunque el tratamiento farmacológico es importante existen otras medidas encaminadas a corregir deficiencias nutricionales y mejorar el estilo de vida que pueden evitar caídas y minimizar la intensidad del impacto de la enfermedad. Por un lado, la importancia de llevar una dieta saludable consumiendo alimentos que contengan calcio y vitamina D, como la leche y derivados lácteos como quesos y yogures, entre otros, y también en otros alimentos como pescado azul y frutos secos ya que el calcio es un alimento fundamental en la formación del hueso. Asimismo, es fundamental controlar la ingesta de cafeína, sal, fósforo, proteínas y alcohol.

A lo largo de la sesión se ha recalcado la necesidad de mantener una vida activa, evitando en la medida de lo posible el sendentarismo. Una actividad física razonable, adaptada a la edad y características de la persona, incrementa la coordinación y potencia los músculos y el equilibrio. En este sentido, los expertos recuerdan la conveniencia de caminar diariamente (al menos 20 minutos al día) y realizar ejercicios suaves como montar en bicicleta, nadar o subir escaleras.

Además del envejecimiento y de la malnutrición, existen otros factores que favorecen la aparición de la osteoporosis como los genéticos, por lo que la incidencia de la enfermedad es mayor en aquellas personas cuyos familiares directos tienen historia previa de fracturas (padres o abuelos) y, el uso prolongado de medicamentos como esteroides, corticoides, antiepilépticos o fármacos para el tiroides.

La participación de los profesionales sanitarios de la Unidad de Gestión Clínica de Bujalance en actividades como ésta es una de sus líneas de acción para promocionar los estilos de vida saludables entre la población y que sus habitantes adquieran estilos de vida saludables. Otra de sus áreas de trabajo en participación ciudadana son las escuelas de pacientes, en concreto han puesto en marcha las aulas de fibromialgia y diabetes.

La osteoporosis

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la osteoporosis como una enfermedad sistémica caracterizada por una masa ósea baja y un deterioro de la microarquitectura del tejido óseo, que conducen a una mayor debilidad ósea y a un aumento del riesgo de fracturas. Las fracturas por fragilidad son la consecuencia de la osteoporosis y son particularmente frecuentes en las vértebras, la cadera y el antebrazo. Estas roturas aumentan exponencialmente con la edad y suponen una causa importante de morbilidad y mortalidad en las poblaciones de ancianos.

Esta enfermedad reumática se da sobre todo en mujeres, especialmente tras la menopausia, debido a la disminución de la tasa de estrógenos y otras carencias hormonales, aunque en los últimos años se está acentuando su incidencia en los hombres, especialmente si tienen una edad avanzada.